Hola Amigos. Vivo en un laberinto, atrapado por un sueldo. Lo cierto es que es un laberinto sin paredes, ni barrotes, ni puertas cerradas ni nada de eso; en realidad se trata de un laberinto desde el que puedo ver calles, casas, playas, montañas, coches, amigos, familia, salud, cosas todas ellas muy agradables y al alcance de la mano para mi disfrute; también veo esperanza, decepción, orgullo, traiciones, ilusión, desconfianza, temor, seguridad, pereza, y más cosas que no quiero enumerar para no cansaros. Pero resulta que el jefe del laberinto, un personaje llamado Sueldo, me tiene retenido y no me deja salir a disfrutarlas. Yo creo que si él no existiera todo sería más fácil. Tengo que hacer todo lo posible para que este infame personaje desparezca de mi vida para siempre; pero lo cierto, amigos, es que no veo cómo. Estoy seguro de que tengo las llaves; a ver si las encuentro.
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